Durante la edición 117ª del maratón de Boston, Massachusetts, el terrorismo se hace presente justo en la meta de llegada.
Es el 15 de Abril del año 2013 y el Sargento Tommy Saunders (Mark Wahlberg) es asignado a vigilar el orden en la línea de meta. El público se concentra donde termina el maratón para ver a sus familiares y amigos cuando finalizan la carrera. Precisamente allí es donde el terrorismo fija su objetivo para hacer más daño y los hermanos Tsarnaev (Themo Melikidze y Alex Wolff) colocan dos bombas caseras que explotan causando daño y caos. Una vez que se presta ayuda a los heridos y se les lleva a diferentes hospitales, llega el agente del FBI, Rick DesLauriers (Kevin Bacon) para iniciar la investigación, a la que se sumará el Sargento Saunders como testigo presencial que aporta datos valiosos. Cuando los terroristas entienden que la policía está por descubrirlos, intentan escapar tomando como rehén a Dun Meng (Jimmy O. Yang). Todos los habitantes de Boston, bajo el lema “Boston Fuerte” cooperan obedeciendo las instrucciones de las autoridades y ayudando en todo lo que pueden. Por su parte las víctimas deciden contraatacar el odio con amor y fortaleza, para rehacer sus vidas.
Dirigida y coescrita por Peter Berg, la cinta muestra un gran abanico de personajes involucrados y sus actividades para ese día, así como las minuciosas investigaciones e interrogatorios a los testigos. Los actores cumplen satisfactoriamente y las escenas del daño causado por ese acto terrorista nos recuerdan una penosa realidad. Sin embargo, más allá de la excelente recreación de los hechos, el principal mérito de la cinta es mostrar cómo, en los momentos difíciles, la comunidad se solidariza en auxilio de los necesitados y el mensaje firme y claro en el sentido de que la única forma de vencer al odio es mediante el amor.
Debido a situaciones de violencia, imágenes sangrientas de personas muy lastimadas, abundante lenguaje grosero y uso de estupefacientes, está clasificada por la MPAA para mayores de 17 años.